El conocido como acné tardío aparece de repente entre los 30-45 años sin darnos cuenta, lo que en muchas mujeres se presenta como una situación de estrés ya que sufren de granos o poros dilatados, al tiempo que no saben cómo tratar la piel para controlar estos primeros signos de envejecimiento que también están apareciendo. El problema es que no sirven las mismas preparaciones clásicas que en el acné juvenil, ya que resecan en exceso la piel adulta. Los productos de cuidado antiedad para pieles maduras pueden aumentar las impurezas y los brillos en la piel de quienes se ven afectadas por este acné tardío.

¿Qué lo provoca?

Los principales factores que provocan el acné tardío son la actividad hormonal (menstruación), el estrés, ciertos fármacos, cosméticos y maquillajes no adecuados o bien factores hereditarios.